¿Por qué hablamos de "Escritura Vivencial" ¿Puedo participar si no tengo experiencia? ¿Cómo funciona? Entre empanadas y vino, el pasado martes 29 de marzo respondimos a estas y otras preguntas, en un encuentro presencial que tuvo lugar en el corazón del Barrio Histórico de Colonia del Sacramento.
Las palabras abren cajones emocionales. La lectura de dos textos breves (uno de El libro de los Abrazos, de Galeano, y un poema de Fernán Silva Valdés) nos mostraron cómo todo un abanico de emociones se despliega, sin necesidad de nombrarlas, a partir de la pintura, con muy pocas palabras, de un par de escenas inolvidables... Hay palabras caricia y palabras cuchillo. Hay palabras sana-sana y palabras luciérnaga, que se prenden y apagan según quién y cómo las usa...
Jugamos también a sacar papelitos con palabras de una cajonera en miniatura: casa - mamá- juguete - libro o cuento - día de lluvia... Cada participante evocaba y compartía. ¡Tantas casas distintas, tantos libros, tantas lluvias! Así, se nos hizo carne lo que también decía Galeano: "Los humanos estamos hechos de historias". Y todos tenemos una o muchas que contar.
Ahora bien, ¿para qué contarlas? En principio, para ex-presar (=sacar de prisión) lo que llevamos dentro. Un mar infinito de recuerdos, impresiones, sentimientos, ideas, creencias... Pescar en ese mar nuestra "pepita de oro". También, como legado o testimonio de un tiempo, una vida. Inclusive como servicio: otros pueden resonar con mi historia, compartir mis preguntas y búsquedas...
Hablamos de escritura vivencial porque partimos de nuestras vivencias. Además, hacemos de la escritura en sí una vivencia transformadora. Un proceso que va de la primera versión a la segunda, tercera...¡las que hagan falta! Nadie nos apura y todo forma parte de un proceso, tan o más importante que el resultado. Perdemos el miedo a equivocarnos. Aprendemos a experimentar, a soltarnos, a jugar...
Las clases comienzan en abril, con encuentros semanales de 2hs por Zoom y, cada tanto, alguno presencial a convenir (no obligatorio aunque sí conveniente: juntarnos tiene un sabor muy especial).
Gracias a Maggie, de @lentasmaravillas, por facilitarnos su hermosísimo lugar y el catering. Y a todos los presentes y demás interesados que siguen escribiendo y preguntando.
Aprender. Ser feliz. Dejar huella... ¿y si lo hacemos TAMBIÉN con palabras? La inscripción continúa abierta: claudia.maiocchi@gmail.com // (+54 9) 115 181 1696.
Te espero.
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